Javiera Parada, que vivió la muerte de su padre tras el Caso Degollados, que militó en el PC y que defendió el Museo de la Memoria, apunta hacia una política de descentralización
La vida de la actriz Javiera Parada ha estado marcada por acontecimientos duros y que resultan traumáticos para el común de la gente. Es la hija de José Manuel Parada, sociólogo asesinado en 1985 en el marco del “Caso degollados”, y que incluso, siendo actriz de TVN con sólo 11 años, fue despedida del canal estatal por el sólo hecho de ser la hija de quien por esos años trabajaba en la Vicaría de la Solidaridad.
A los 13, Javiera Parada se integró a las Juventudes Comunistas, lo que supuso un crecimiento personal casi de golpe, cuando no es normal que una niña se involucre directamente en política, menos en esos años de grandes divergencias sociales.
Sin embargo, hoy no ha dejado de ser crítica, sobre todo luego de los dichos de Magdalena Krebs, directora de la Dibam en 2012, quien cuestionó la “función pedagógica” del Museo de la Memoria, que recoge testimonios sobre detenidos desaparecidos con posterioridad al 11 de septiembre de 1973, señalando que “sería una gran contribución que el museo explicara los hechos anteriores al golpe”.
Frente a esto, Javiera Parada respondió con un carta, aseverando que de acuerdo a los dichos de Krebs “se entiende que la tensión social previa al golpe de Estado, las tomas de fundos y fábricas, las colas, el desabastecimiento, el inexistente Plan Z, serían antecedentes a ser considerados en la muestra del Museo de la Memoria para explicar por qué se asesinó, violó, torturó, desapareció y exilió a miles de compatriotas luego del golpe
CON NUEVOS BRÍOS.
Javiera Parada hoy se enfrenta a un nuevo escenario: Es la encargada de Asuntos Culturales de la candidatura de Michelle Bachelet, condición que le permitió recorrer La Serena y Coquimbo, donde se reunió con diversos agentes culturales, actores, líderes sociales y simpatizantes de la expresidenta.
También tuvo espacio para conversar con los medios de comunicación, y por supuesto, aprovechó la instancia para marcar los puntos que, a su juicio, diferenciarían la posible futura gestión de la directora de ONU Mujeres en términos culturales con respecto a la actual administración, a la que, por cierto, le reconoce algunos logros, pero guarda una serie de reparos que fundamentó en diálogo con El Día.
-¿Cuál sería el sello cultural de Michelle Bachelet si es que logra la Presidencia?
“La gran diferencia con la actual administración es que situaría la cultura en el centro del desarrollo social y político de este país. Ha llegado el tiempo en que la cultura deje de ser el ‘pariente pobre’ de otras políticas, y ella tiene el convencimiento de que para terminar con la inequidad, la cultura debe estar en el centro del debate y en el actuar del Estado. A partir de ahí van a surgir una serie de medidas que tienen que ver con la descentralización, la profesionalización de la gestión y los centros culturales que se han hecho, ya que el foco ha estado en el fomento a la creación, pero tenemos una gran deuda pendiente con la circulación de las obras lectivas de educación artística. No vamos a terminar con la inequidad en Chile si no terminamos con la inequidad en cultura”.
-Las propuestas de Bachelet en términos educacionales son ambiciosas. ¿Lo son en cultura?
“La Presidenta Bachelet está convencida, al igual que yo y un gran número de chilenos, que ha llegado el momento de hacer cambios estructurales. No podemos seguir pensando en el desarrollo económico sin redistribuir esa riqueza y para eso ella ha planteado una reforma tributaria. De igual forma, no podemos pensar en un país desarrollado si las regiones no están empoderadas y si no nos reconocemos como un país multicultural. Sí, somos ambiciosos en todos los sentidos y por supuesto en cultura”.
-¿Cómo evalúan lo realizado por la gestión de Luciano Cruz-Coke, considerando sus buenas ponderaciones en las encuestas?
“Se han hecho buenas cosas en estos cuatro años. El sector cultural es de los que tengo mejor impresión en este gobierno, pero creo que se ha puesto énfasis en las industrias culturales, desatendiendo otros sectores. Siento que ha habido un desmedro de las que no son industrias culturales, y de las iniciativas que ha mandado el Consejo de la Cultura al Congreso, 34 iniciativas de ley, 31 no han sufrido trámite”.
-¿Cómo consideran la eventual creación de un Ministerio de Cultura, lo que fue anunciado por el Presidente Piñera el 21 de mayo pasado?
“Es una promesa incumplida lo del ministerio, ya que, además, lo planteó en el 21 de mayo de 2011. Soy proministerio, sobre todo porque no se perderían los órganos consultivos de la sociedad civil. Es importante que la institucionalidad cultural esté concentrada en un ministerio”.
-¿Cómo enfrentan ustedes los retrasos del Teatro Regional de La Serena, que incluso podría materializarse en un próximo período?
“Esta iniciativa corresponde al gobierno de Michelle Bachelet, donde ella estableció que en lugares donde vivieran más de 50 mil personas se requería de un centro cultural de primer nivel. Pero más importante me parece es que cuenten con gestores preparados que puedan programar y buscar recursos, porque un centro cultural sin un plan de gestión no nos sirve de nada. No podemos dejar de preocuparnos, además, de otras instituciones culturales que están en los barrios, en los pueblos, en las ciudades pequeñas, porque la cultura también está en las poblaciones”, concluyó.
En cuanto a las primarias
Según Parada, la posibilidad de contar uno de los primeros puntos que tocó la expresidenta Bachelet al regresar desde Estados Unidos. “Para ella es muy importante la práctica de las primarias, donde podemos discutir programas y elegir a los candidatos que Chile necesita. Creo que la invitación es no sólo a pensar en el próximo gobierno, sino mirando hacia un nuevo ciclo político en los próximos 20 años, sin los niveles de inequidad que actualmente tiene."
http://www.diarioeldia.cl/articulo/otra-parada-cultural-michelle-bachelet
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